miércoles, 7 de enero de 2009

SAN....

ESTAMOS A DÍA....





NUEVOS PROCESADORES INTEL: I7

Intel dio en Japón el pistoletazo a la venta de sus nuevos procesadores Core i7.

Cae el número de futuros profesionales TIC

Y lo hace en un 43% en los últimos 4 años, lo que pronostica una carencia aún mayor de profesionales de la tecnología de la información en los próximos años. Se estima que el principal motivo de esta situación es la falta de interés de los jóvenes por estas carreras, según se deja ver en el estudio conducido por el Ministerio de Trabajo.
El estudio, de nombre Adapta, revela que los jóvenes tienen menos vocación por las carreras relacionadas. Los números lo dicen todo: entre los cursos 2002-2003 y 2006-2007 la cantidad de estudiantes que cursaban estos estudios ha caído un 43%, una cifra parecida a los alumnos matriculados en el primer curso de Bachillerato de Ciencia y Tecnología: 45,17 por ciento. Lo mismo pasa con los de FP.
La falta de vocación viene principalmente motivada por la percepción de que los trabajos que se deducen de estos estudios están mal pagados pese al esfuerzo que supone sacarse la debida titulación. La imagen social estereotipada de estos profesionales tampoco ayuda: abstraídos, con escasa vida social o huraños.
La conversión de profesionales y la contratación de personal extranjero parece la solución para resolver el déficit de empleados. A largo plazo, se proponen medidas como la formación de desempleados del sector, fomentar una definición más clara de los puestos de trabajo, y más acreditación en cuanto a la certificación de la cualificación personal.

Informática y ecología: una cuenta pendiente

Informática y ecología son temas que no van desparejados. Es más: muchas veces hemos hecho referencia a noticias de esta guisa. Y es que cuando el ser humano decide crear algo que nos haga la vida más fácil, o bien nos entretenga, inevitablemente el medio ambiente se ve afectado, ya que todo requiere de una infraestructura para que esos objetos nazcan, crezcan y se reproduzcan. Y toda infraestructura, también de forma inevitable, modifica su entorno. La forma en que lo hace (agresiva o pasiva) es lo que determina que una empresa u otra sea más o menos amigable con el entorno que lo rodea.

Los factores que influyen en la relación informática y medio ambiente son amplios y muy numerosos, y muy difícilmente en un solo editorial los podríamos enumerar todos, pero intentaremos hacer un repaso conciso de los más importantes, de los aspectos que resultan clave a la hora de crear productos informáticos y de usarlos, y cómo esas prácticas afectan al medio ambiente.
No se trata de moralizar a nadie ni de crear polémica. El fin de este editorial es que todos seamos conscientes de que el cuidado de lo que nos rodea es algo tan importante como respirar o comer. Muchas veces se requiere tan poco para que mejoren las cosas, para que se dañe menos nuestro entorno, que la diferencia entre hacer algo o no hacer nada es determinante para nuestro futuro y el de mucha gente. No se trata de volvernos ecologistas de repente, ni de vigilar cada uno de nuestros movimientos: con un solo gesto es suficiente para que todo cambie.
Daremos datos sobre la situación actual, también sobre la influencia de las grandes empresas informáticas sobre el medio ambiente (tanto los aspectos buenos como los aspectos malos), y qué cosas podemos hacer nosotros para proteger el medio ambiente. La idea es hacernos una idea general sobre la situación que vivimos y sobre este tema, para que todos los que lo deseen puedan tener una idea aproximada de lo que ocurre y adquirir cierto conocimiento de causa.